Wakayama

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Wakayama tiene un encanto especial; es una mezcla de historia, naturaleza y gastronomía que la convierte en una ciudad muy interesante para visitar.

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La ciudad de Wakayama está situada en el sur de la isla Honshu a una hora de Osaka y a 40 minutos del Aeropuerto Internacional de Kansai. Es un lugar ideal y completo donde no solo podrá aprender de la historia de Japón sino que también estará rodeado de naturaleza y de una importante gastronomía.


La historia de esta ciudad está representada en el castillo de Wakayama que se ha convertido en el símbolo de la ciudad. También es conocido como castillo blanco por sus paredes resplandecientes en este color. La importancia del castillo radica en su historia. Ha llegado a ser templo budista antes de convertirse en casa feudal especialmente durante la época Edo. La Segunda Guerra Mundial provocó la destrucción de este castillo que fue reconstruido en 1958. Pero también hay mucha importancia histórica del periodo Edo en el puente Ohashiroka ya que solo los señores feudales podían cruzar ese puente. Por otra parte los templos de la ciudad nos harán entender la importancia de la religión en esta localidad.


Pero Wakayama no es solo historia también tiene naturaleza con unas hermosas vistas de la costa, espléndidas playas donde sentirás la fragancia del mar, además de bonitos jardines de estilo japonés, paisajes a orillas del río y sus fantásticas puestas de sol.


En cuanto a gastronomía tiene varios platos y productos estrella. No deberías irte sin probar ramen, mariscos frescos, atún o dorada procedentes de sus cercanas aguas del mar.



Recomendamos como primera visita y la más importante de la ciudad, el castillo de Wakayama. Desde el castillo se puede obtener unas espléndidas vistas de la ciudad y del río que baña la localidad. El castillo original fue construido en 1585 pero el actual es una reconstrucción del original que fue destruido en la Segunda Guerra Mundial.


Cuando termine la visita podrá dar una vuelta por el jardín Momijidani que es un precioso jardín tradicional japonés donde podrá disfrutar de un delicioso té verde servido en la casa del té. Después puede visitar el Centro Histórico de Wakayama donde entenderá más sobre la ciudad, el castillo y las personas que han rodeado su historia.


Los mejores momentos para visitar la ciudad es en primavera con los cerezos floreciendo y dándole ese pintoresco color y en otoño en el que las hojas adquieren un color rojizo. Tendrá unas inmejorables vistas desde su parte superior y los ninjas le darán la bienvenida ayudándole en todo lo que necesite durante la visita.


Además también podrá subir los 231 escalones para llegar al templo Kimii-dera desde donde tendrá unas vistas espectaculares de la bahía y donde contemplará sus dos pagodas y un santuario principal. El templo Awashima es curioso ya que guarda una colección de muñecas de todo el país.


Por otra parte nos sorprenderá el parque temático Wakayama Marina City que nos recordará a una ciudad española del mediterráneo. El parque está situado en un islote y en él también encontrará el mercado Kuroshio. Este mercado es otro punto de interés de la ciudad. Podrá ver una demostración de cortar atún, comprar pescado fresco o comer el alguno de sus puestos.


Pero también el turismo se centra en sus playas. Las playas de Wakayama son hermosas. Recomendamos la playa de Kataonami o la playa de Namihaya seleccionadas como las mejoras áreas de playa de la zona.

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